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Lactancia materna

La lactancia materna se considera la alimentación ideal del lactante.

Se ha demostrado que los niños que no fueron amamantados tienen mayores probabilidades de tener más enfermedades, no solo durante la época de la lactancia, sino muchos años después. Por consiguiente, la lactancia materna de más de tres meses de duración puede disminuir el riesgo de otitis media, infecciones respiratorias, asma y dermatitis atópica. Asimismo, una lactancia de más de seis meses de duración puede disminuir el riesgo de leucemia en un 20% y en un 36% el riesgo de muerte súbita.

Por otro lado, amamantar es beneficioso para la madre porque ayuda a mejorar su salud presente y futura; reduciendo las hemorragias postparto, mejorando la remineralización ósea postparto, disminuyendo el riesgo de cáncer de mama y ovario, y de diabetes tipo 2. Del mismo modo, promueve el estrecho contacto físico con el lactante y la creación del vínculo afectivo, lo que resulta óptimo para su desarrollo y hace que la madre experimente un gran sentimiento de satisfacción y autoestima.

Por todo ello, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que todos los lactantes sean amamantados en exclusiva durante los primeros seis meses y junto con otros alimentos complementarios hasta los dos años de edad o más, mientras madre e hijo lo deseen.

¿En qué me tengo que fijar para saber si se instaura una buena lactancia materna?

Indicadores de buen agarre y posicionamiento– Boca abierta
– Menos areola visible por debajo de la barbilla que por encima del pezón
– La barbilla del lactante toca el pecho, el labio inferior está enrollado hacia abajo y la nariz libre
– No hay dolor
Indicadores de alimentación correcta en los lactantes– Deglución audible y visible
– Succión rítmica sostenida
– Brazos y manos relajados
– Boca húmeda
– Pañales empapados regularmente
Indicadores de lactancia materna adecuada en las madres– Ablandamiento de la mama
– Sin comprensión en el pezón al final de la toma
– Se siente relajada
¿Qué posturas son ideales para amamantar a nuestro hijo?

Se suele aconsejar la postura de crianza biológica durante los primeros días y si existe alguna dificultad en el agarre (dolor, rechazo del pecho, grietas, etc.), aunque se puede utilizar en cualquier momento.

Para las tomas nocturnas y en los primeros días se recomienda la postura acostada, aunque suele ser más incómoda y menos eficaz que la posición de crianza biológica.

Pasados los primeros días se aconsejan posturas sentadas, cuando la madre tiene mayor movilidad y seguridad con el recién nacido.

Si el niño presenta reflujo gastroesofágico, fisura palatina o labio leporino, prematuridad, mandíbula pequeña o problemas de hipotonía se recomienda la postura de caballito.

Crianza biológicaAcostadaSentadaCaballito
¿Afecta restringir las tomas nocturnas en la duración de la lactancia materna?

Se ha demostrado que la duración de la lactancia materna se relaciona de forma significativa con una mayor frecuencia de tomas nocturnas. En concreto, una media de entre cuatro y seis tomas nocturnas se asocia con una duración media de lactancia de casi 12 meses, mientras que la restricción de tomas durante la noche se relaciona con un tiempo medio de 6 meses. De hecho, la limitación del número de tomas nocturnas es uno de los factores que se asocia con el cese de la lactancia materna.

Por lo tanto, la lactancia materna debería ser a demanda para todos los lactantes sanos, respetando siempre el ritmo nocturno del bebé.

¿Cuál es el método más eficaz para la extracción de calostro?

Es la madre quien elige el método para la extracción de leche, pero se sugiere como método más eficaz la extracción manual del calostro porque optimiza la cantidad extraída.

Puede haber ocasiones donde la madre no se sienta cómoda utilizando la extracción manual, por lo que se podría hacer uso del extractor de leche.

¿Afecta el uso del chupete a la lactancia materna?

Actualmente, se sabe que la lactancia materna es mayor en niños que no utilizan chupete en las primeras cuatro semanas de vida. Sin embargo, no existen diferencias significativas a los tres y cuatro meses entre los niños que usan chupete y los que no, así como a lo largo de un año.

¿Se aconseja administrar de forma rutinaria suplementos a nuestro hijo amamantado?

A día de hoy se recomienda evitar administrar suplementos a nuestro hijo, siempre y cuando no exista una indicación médica que lo justifique.

Se sabe que no administrar suplementación se correlaciona con una mayor proporción de niños lactantes a los tres meses, así como una mayor duración de la lactancia materna y la lactancia materna exclusiva.

Si tenéis dudas sobre la lactancia materna, el área de Logopedia de Neuraxis estará encantada de responderlas. Nuestro equipo de expertos está comprometido en proporcionar el apoyo y la información necesaria para asegurar el bienestar y el desarrollo óptimo de sus hijos.