El frenillo lingual es un pliegue que conecta la lengua con el suelo de la boca, permitiendo que la parte anterior de ésta se mueva libremente y realice correctamente los movimientos de succión, masticación, deglución, habla y respiración.
¿Qué es la anquiloglosia?
La anquiloglosia se caracteriza por un frenillo lingual anormalmente corto que dificulta la movilidad de la lengua. Es una anomalía congénita debido a un fallo embriológico en el proceso de separación de la lengua del suelo de la boca.
Además, es hereditaria, más frecuente en niños y puede estar asociada a algún síndrome (por ejemplo, síndrome de Pierre – Robin).
Tipo I | Imagen extraída de: Dr. Calderón Polanco | Forma de corazón, se ve a simple vista. Movilidad muy restringida. Ni eleva ni protruye. |
Tipo II | El frenillo se inserta un poco más atrás de la punta de la lengua. Elevación y protrusión con mucha dificultad. | |
Tipo III | Inserción más posterior. La protrusión de la lengua no suele estar comprometida. La elevación lingual está restringida. | |
Tipo IV | El frenillo no se ve a simple vista. Está anclada al suelo de la boca. Restringe prácticamente la totalidad del movimiento lingual. |
¿Cuál es su diagnóstico?
Anteriormente el diagnóstico no se hacía antes de los 5 años porque existía la creencia de que hasta ese momento el frenillo lingual podía alargarse o sufrir una ruptura espontánea, pero en la actualidad se ha comprobado que la composición en todos los tipos de frenillo lingual no permite que se rompa espontáneamente o se estire con ejercicios.
Para evaluar las características anatómicas del frenillo se utiliza la posición de elevación lingual, ya que se observa con mayor precisión que en la posición de protrusión.
¿Qué dificultades provoca la anquiloglosia?
La anquiloglosia, al restringir los movimientos linguales, también va a comprometer las funciones en las que interviene ésta en mayor o menor grado.
La lengua tiene un papel fundamental en la lactancia materna. Los bebés con anquiloglosia presentan dificultad en los movimientos linguales durante la lactancia, pudiendo ocasionar una retirada ineficiente de la leche materna.
Síntomas durante la lactancia | |
Dolor en la toma | Es una de las causas más frecuentes de abandono de la lactancia materna. |
Lesiones en el pezón | Irritaciones, grietas o ampollas que se producen en el pezón debido al mal agarre. |
Deformidad del pezón tras la toma | Si el pezón sale aplastado, con la punta en forma de pintalabios, significa que está siendo masticado. |
Dificultades en la producción de leche | – hipogalactia si la succión es ineficaz. – Hipergalactia (si a partir de los 3 o 4 meses no está regulada). |
No ganancia de peso | Debido al mal agarre del pezón y al uso de la musculatura compensatoria. |
Se duerme al pecho | El uso de la musculatura compensatoria hace que se agote más y pierda mayor energía. Consume más calorías. |
Tomas largas continuadas | No es frecuente que un bebé tarde más de 40 minutos. |
Aerofagia, cólicos, reflujo y regurgitaciones | Ocurre cuando el sellado del pecho no es adecuado y tragan aire. |
Biberón y chupete | Es frecuente observar dificultades con estos dos aspectos. |
Por otro lado, la anquiloglosia favorece la posición baja de la lengua, afectando el crecimiento orofacial. Por consiguiente, ocasiona un desarrollo anormal del paladar duro (paladar ojival) y provoca que el niño tienda a ser respirador oral.
En cuanto a la masticación, la anquiloglosia dificulta la limpieza oral y el paso de la comida de un lado a otro.
Por último, se suelen presentar dificultades en el habla ya que se utilizan estrategias compensatorias de los labios, la lengua y la mandíbula para producir algunos sonidos, en especial /r/, /l/, /n/, /t/, /s/, /z/ y /d/.
Así mismo, en muchos otros casos también se realizan compensaciones para permitir que estas funciones se realicen, independientemente de las dificultades que existan.
¿Cuál es el tratamiento de la anquiloglosia?
La frenectomía lingual es la intervención quirúrgica elegida para el tratamiento de la anquiloglosia. Es un procedimiento que corrige las restricciones en el frenillo lingual extirpando la banda de tejido que conecta la parte inferior de la lengua con el suelo de la boca.
Después de la intervención quirúrgica, es importante acudir al logopeda ya que múltiples estudios afirman que con la terapia miofuncional se consigue una mejor elevación y movilidad lingual, así como una mejor apertura de la boca, posición de la lengua y precisión durante la producción del habla. Demostrándose así, que la cirugía asociada a la intervención logopédica produce mejores resultados.
¡Ojo!, en algunos síndromes como Pierre – Robin, por tener muy marcada la retrognatia, no está recomendada la cirugía por riesgo de glosoptosis (desplazamiento hacia atrás de la lengua).
La implicación del logopeda es imprescindible en el diagnóstico y tratamiento del frenillo lingual alterado, pues es la encargada de rehabilitar la lengua y establecer hábitos funcionales.
Si tenéis sospechas de que vuestro peque pueda presentar este tipo de alteración, no dudéis en contactar con nosotros. Estaremos encantados de ayudaros a determinar cuál es la mejor opción de tratamiento.