En el blog de hoy pretendemos enseñar, de forma práctica, a sacarle partido a los tableros de “recompensa” o economía de fichas. Aunque estamos seguros que habéis oído hablar en muchas ocasiones de ellos, puede ser que no tengáis tan claro cómo utilizarlo para sacarle el máximo partido para modificar la conducta de tu hijo o hija.
¿Qué es la economía de fichas?
La economía de fichas es una técnica de modificación de conducta basada en el refuerzo positivo de la conducta o tarea que queremos que el niño realice y genere hábito.
Además, también nos puede ser muy útil para fomentar la autonomía en una actividad concreta que queremos potenciar, como por ejemplo: “ducharse solo”, “atarse los zapatos” o “poner la mesa”.
¿Qué significa “estar basada en el refuerzo positivo”?
Significa que reforzaremos siempre que aparezca la conducta deseada e ignoraremos las conductas negativas, es decir evitaremos los “castigos» por no hacer.
Cuando usamos una economía de fichas, además de seleccionar las conductas a modificar, debemos elegir una recompensa al llegar a una meta. Todo esto es importante que esté consensuado y pactado con el/la niño/a.
¿Cómo funciona “tablero de recompensas” o economía de fichas?
- Se seleccionan las conductas/tareas a modificar.
- Se selecciona cuál será el reforzador de la conducta (pegatinas de colores o imanes, normalmente) que marcará en el tablero cuando la haya conseguido.
- Se selecciona la recompensa a alcanzar al final del tablero. (ir al cine, un paseo en bici, etc.)
- Se decide cuántas fichas se necesitan para conseguir la recompensa al final del tablero (al final del mes o de la semana).
Una vez conocemos el funcionamiento de la economía de fichas, debemos diseñar un tablero. Para esto siempre hay opciones y gustos, pero lo más importante es que el diseño sea acorde a la edad del niño al que vaya destinado para que sea capaz de entender su funcionamiento. Por ejemplo, usaremos imágenes y no frases en niños que aún no han adquirido la lectoescritura.
Si eres un poco mañoso con las manualidades puedes aventurarte uno propio tablero y si no es tu caso, también los puedes encontrar ya prefabricados a la venta. Aquí os dejamos un ejemplo.
Si tenéis pensado instaurar un tablero de recompensa o economía de fichas, es importante tener en cuenta:
Seleccionar las conductas/tareas que quiero modificar instaurar: Seleccionamos consensuadamente con el niño las conductas que incluiremos en el tablero. Las conductas o tareas tienen que tener unas características específicas
- Conductas medibles. Debemos seleccionar conductas que podamos objetivar y medir. Por ejemplo, “portarse bien por la calle” puede ser algo subjetivo sin embargo si ponemos “cruzar la calle de la mano” podemos cuantificarlo.
- Consensuarlas con el niño. Debemos de seleccionar las conductas conjuntamente con el niño. Hacerlo partícipe de la creación del tablero facilitará que el niño conozca el funcionamiento del sistema de economía de fichas y su motivación a participar.
- Estar seguros que la conducta es asequible para el niño es decir cuantificar muy bien la exigencia para que las recompensar finales sean conseguidas en un tiempo prudencial y el niño genere hábito a través de la motivación. Por ejemplo si el niño ya se viste podemos dar una pegatina si lo hace por la mañana, pero si la conducta es más complicada a alcanzar como por ejemplo dormir solo y lo consigue pues esa debe tener más valor en el tablero
Selección del refuerzo de cada conducta/tarea:
- El refuerzo no siempre tiene que ser algo muy costoso o material, es importante que lo acordeis juntos. Puede ser un paseo en bici, un paseo por el monte, ir al popipark o un día de piscina en familia… Eso sí algo que no hagáis habitualmente.
- Acordar antes cuándo se pondrán las pegatinas y explicar al niño/a que las pegatinas siempre las otorga el adulto, aunque después las pegue él/ella.
- Es muy importante ponerlas todos los días y repasar cómo ha ido el día.
- Por supuesto reforzar lo que se ha conseguido y animarlo a que mañana lo hará aún mejor.
Sabemos que instaurar un tablero no es fácil. Por ello, si tenéis alguna duda de cómo instaurarlos o de si a vuestro hijo/a puede beneficiarle, podéis poneros en contacto con el equipo de Neuraxis. Nuestro equipo de terapeutas ocupacionales estarán encatadas de asesoraros.