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Cómo trabajar las habilidades de preescritura en casa

¿Cómo trabajar las habilidades de preescritura en casa?

A partir del año o año y medio de vida, los niños pueden comenzar a garabatear con lápices o colores en un papel. La realización de este tipo de actividades, conocidas como de PREescritura, favorece su desarrollo grafomotriz o de motricidad fina, beneficiando a su vez, un buen desarrollo motriz y  aportando las bases para la futura escritura.  En las primeras etapas del desarrollo de estas habilidades de preescritura, los trazados deben ser libres y en un espacio amplio, lo que ayudará a que el niño poco a poco, vaya controlando los espacios y/o márgenes del papel. A medida que el niño va creciendo y adquiriendo habilidades, podemos ir introduciendo otro tipo de utensilios más finos y por tanto de mayor complejidad de manejo. Estos pueden ser rodillos, brochas, tizas, distintos tipos de ceras, hasta llegar finalmente al uso del lápiz.  Al igual que en otras áreas de desarrollo, en cuanto a la grafomotricidad se refiere, cada niño evoluciona de forma diferente, lo que quiere decir que cada niño pasará por diferentes etapas en el agarre de los utensilios de escritura y lo hará según su desarrollo en un momento u otro del mismo. Dicho esto, recordar que siempre es importante respetar los tiempos de cada niño. Vamos a comentar brevemente, mediante un pequeño cuadro, los posibles agarres según la edad aproximada de nuestro pequeño.

¿CÓMO AGARRA EL LÁPIZ UN NIÑO SEGÚN SU EDAD?

  Edad Tipo de agarre Movimientos Entre 12 y 18 meses  Presa palmar supinada Mueve Hombro y brazo Entre los 2 y 3 años Presa digital pronada Mueve codo y antebrazo Entre 3 años y medio y 4 años Pinza cuadrípode (4 dedos) Mueve muñeca y hombro más estable. A Partir de 4 años hasta los 7 años Pinza trípode (pulgar, índice y corazón) Mueve los 3 dedos al unísono.  

  1. Pintar con tiza en el suelo

Se trata de una actividad muy atractiva y sencilla de realizar porque no requiere de mucho material, tan solo unas tizas (más gruesas para niños más peques y más finas para los más mayores) y de una poca imaginación. Podremos hacer tantas cosas en el suelo con las tizas como se nos ocurran. Aquí os dejamos algunas propuestas:

  • Dibujo libre con las tizas. El niño puede imaginar y realizar el dibujo que desee.
  • Recrear una pequeña ciudad en el suelo, llena de caminos.Después, el juego puede continuar jugando con coches por esos caminos ya trazados.
  • El adulto creará un dibujo sencillo realizando su silueta en el suelo mediante puntos separados, una vez hecho esto, los niños deberán unir los puntos con la tiza hasta descubrir cual es el dibujo oculto.
  • Unión de elementos comunes. Dibujar objetos que tengan alguna relación, números, letras. El niño deberá identificar la relación que tienen y los unirá con las tizas.

 2  Trazos en la arena Para esta actividad se necesita un recipiente cuadrado con una poca arena de playa, es aconsejable, que la base del recipiente tenga un color que contraste para percibir bien el trazo en la arena. Esta actividad es muy versátil porque puede utilizarse en las diferentes etapas del desarrollo grafomotriz de los niños. Tan solo tendremos que graduar su dificultad según la etapa de desarrollo en la que se encuentren.  El niño tendrá que dibujar diferentes trazos en la arena, con su propio dedos o con un instrumento (palito, pajita).  Como comentaba antes, dependiendo de su edad se le ofrecerá un tipo de actividad u otra. Podemos pedirle a nuestro peque que reproduzca en la arena formas geométricas, letras, números o palabras completas si  se encuentra en una etapa en la que ya haya adquirido la lectoescritura.

3 Formas con plastilina El uso de este famoso material maleable, contribuye al desarrollo de la musculatura de las manos de nuestros peques, favorecerá a la motricidad fina y por tanto, a un buen agarre futuro de los utensilios de escritura. Con la plastilina, al igual que con la arena, también podréis graduar la dificultad en función de la etapa en la que se encuentre el niño.  Podemos proponerle hacer copias de diferentes formas geométricas, números, letras o palabras completas.

4 Búsqueda tesoros en gelatina Por último os proponemos una actividad con la que los pequeños disfrutaran al máximo, un poco viscosa pero muy entretenida.  Será necesario un recipiente, una poca gelatina que podréis encontrar en cualquier supermercado y objetos pequeñitos del interés del niño (animales, letras, números, dinosaurios, coches, etc.) Prepararemos la gelatina en el recipiente con los objetos dentro y cuando esta esté solidificada, a jugar!!! El niño deberá, escarbar hasta encontrar y liberar todos sus pequeños tesoros escondidos bajo la gelatina. Esta actividad además de contribuir con el desarrollo de la motricidad fina, tiene un gran componente sensorial. 

Si desde el centro educativo o en casa se observan dificultades en el desarrollo de la motricidad fina en etapas de preescolar, es importante consultarlo con un especialista ya que una intervención temprana ayudará a evitar posibles complicaciones en la adquisición futura de la escritura.